jueves, 31 de diciembre de 2009

EL ADIOS A LA VIDA (TOSCA)



TOSCA
Mario Cavaradossi es un pintor romano, amante de la conocida cantante Floria Tosca, mujer de muy fuerte carácter (famosa por su voz y por sus terribles celos), de ideas revolucionarias y antimonárquicas.
El barón Scarpia es el jefe de la Policía Real Romana, hombre de mala vida y de nula moral y sentimientos, que desea mantener relaciones sexuales con Tosca y odia a los tipos como Mario.
Mario ayuda a escapar a un amigo republicano prófugo del Castel Sant' Angelo y lo esconde en su casa donde vive con Tosca. Scarpia lo descubre todo torturando a Mario y haciendo confesar a Tosca. Este la maldice y le jura a Scarpia que Napoleón los liberará de su yugo, por lo que se le condena a muerte por fusilamiento al amanecer en la azotea del Castel Sant' Angelo por sedición.
Presionada por la extrema situación, Tosca acepta la proposición indecente de Scarpia de pasar la noche con él y mantener relaciones sexuales, a cambio de la vida de Mario y un salvoconducto, para lo cual debería simularse la ejecución. Scarpia da las instrucciones en clave, y hace creer esto a Tosca, quien acto seguido lo apuñala al tratar Scarpia de consumar su maquiavélico plan.
Tosca presencia la ejecución simulada de Mario, y luego descubre aterrorizada la atroz trampa que desde la tumba le tendió Scarpia ya que no fue un simulacro, sino que fue una ejecución real y no fingida, como la hizo creer a Tosca. Descubierto el crimen de Scarpia por los subalternos, esta se lanza al vacío desde la azotea.

sábado, 26 de diciembre de 2009

SIN RETORNO

A hí va una de un buen amigo de Paulino, residente en Granada y director de la revista literaria Extramuros, Rafael Rodríguez Almodóvar, de su obra "Memorias de untiempo cumplido"

SIN RETORNO

Coágulos de pena
enrojecen la luna.
De vez en vez
sus rayos iluminan
el frío de la alcoba

En la almohada se abrazan
las vueltas de la noche,
seca la boca
de tanto grito inútil.

La mañana florece
y un nuevo día se abre
con cólera y desgano.

El tiempo amenaza
con pasos de futuro
y queda al pié un árbol
que nunca dará frutos.

domingo, 20 de diciembre de 2009

¿ HACIA DÓNDE CAMINAS.... ESPAÑA ?

Ofelia Esperanza Alonso Laguillo, desde Uruguay, se adhiere a la lucha antiaborto que en este momento tenemos en España.
Con ésta poesía de la literatura gauchesca del escritor uruguayo Serafín J. García, quiere expresarnos su repudio a la tan cuestionada “ley de Herodes”
En éste tiempo de Navidad, tan significativo para los cristianos, deben redoblar vuestra lucha y lograr que la misma no sea aprobada.
Ofelia Esperanza Alonso Laguillo

Venga p'acá, m'hija. No me tenga miedo.
Venga que su papa no va'castigarla
ni va'echarle'n cara tampoco lo qu'hiso,
porque sabe cierto que no jué por mala.

Ya basta de yantos. Miremé de frente.
No tenga vergüensa de amostrar la cara,
que no es un delito darse por cariño,
y sentirse madre no es nunca una falta.

Venga y déame un beso. Su papa compriende
que usté ha cáido, m'hija, lo mesmo que tantas
que siendo inocentes, y humildes, y güenas,
s´entriegan enteras, en cuerpo y en alma.

Moso él, usté mosa, los dos juertes, sanos,
yenitos de vida ricién aclarada,
no vido él querencia mejor que sus brasos
ni usté sol más lindo qu'el de sus miradas.

Campiando ese cielo que tuitos campiamos
-yevando'e baquianas a las esperansas-,
creyeron hayarlo, juntando sus bocas,
y prendieron besos pa que s'estreyara.

Vino la dentrada de la primavera;
lucieron los cardos sus flores moradas;
bordonió el sumbido de los mangangases
y hubo contrapuntos de roncas chicharras.

Nació en los yuyales un aroma nueva
qu´el viento, travieso, mojó en las cañadas;
rosaos macachines garugó l'aurora
y en los espiniyos colgó el sol sus brasas.

Se oyó en las cuchiyas relinchar los potros
qu´iban retosando tras de la yeguada;
y olfatiando el aire, y escarbando el suelo,
con ansia salvaje baló la torada.

Se vido a los pájaros andar en parejas,
juntitos los picos, abiertas las alas,
amostrando a tuitos su amor baruyento,
madurao a cielo, sol desnudo y alba...

Y ustedes sintieron juego en las alterias;
cada beso, entonce', jué com'una brasa;
les hirvió po'adentro la juersa'el instinto,
y ansina cumplieron la ley más sagrada.

¡No yore, canejo! ¡Si Papa Dios hiso
al macho y la hembra pa que se ajuntaran,
y el cristiano, mesmo que cualquiera bicho,
debe hacer las cosas que Papa Dios manda!

No l'importe, m´hija, qu'el pago mermure
y ensucén su nombre los que la crén mala.
¡Pior que usté son esas que matan sus crias
pa poder ansina seguir siendo honradas!

Cuando nasca su hijo, ¡que lo sepan tuitos!:
mamará en sus pechos, dormirá en su falda:
será su cachorro, nomás, ande quiera,
pues ser madre, m'hija, no es nunca una falta!

Serafín J. García
De "Tacuruses"
Panorama de la Poesía Gauchesca y Nativista del Uruguay